El mezcal no es solo una bebida, es una experiencia llena de tradición y sabor. Elegir con qué se toma el mezcal es clave para resaltar sus notas únicas y disfrutarlo al máximo. Desde su frescura herbal en un mezcal blanco hasta las notas profundas de un reposado, esta bebida versátil se adapta a cualquier ocasión.
Puedes acompañarlo con frutas, jugos, sales o incluso refrescos, según tu gusto. No hay una sola forma correcta de disfrutar, y explorar diferentes combinaciones es parte de su magia. Aquí descubrirás las mejores opciones para potenciar el sabor de tu mezcal favorito.

Con qué refresco se toma el mezcal
Con qué refresco se toma el mezcal es una duda frecuente al buscar formas de disfrutar esta bebida única. Aunque el mezcal suele tomarse solo, los refrescos pueden complementar sus sabores de manera sorprendente. Aquí tienes algunas opciones recomendadas:
- Agua mineral: Realza las notas naturales del mezcal sin alterar su sabor.
- Refrescos cítricos (limón o toronja): Aportan frescura y un toque ácido que equilibra el carácter robusto del mezcal.
- Refrescos de tamarindo o jamaica: Ideales si buscas un perfil más dulce y una combinación con matices frutales.
La clave está en encontrar un refresco que potencie los sabores del mezcal sin opacarlos. Ya sea para una tarde relajada o una celebración, estas opciones te garantizan una experiencia refrescante.
¿Sabías que el agua mineral con un toque de limón es una de las formas más populares de disfrutar del mezcal en eventos sociales en México?
En breve te explicaremos algunos tipos de mezcal y como puedes tomarlos para no perderte ni una sola gota y recuerda que uno de los mejores mezcales de méxico es guardián del tesoro por su sabor y el proceso que lleva la elaboración.

¿Con qué se toma el mezcal reposado?
El mezcal reposado ofrece un perfil de sabor único, con notas dulces, amaderadas y ligeramente especiadas gracias a su tiempo de reposo en barricas. Para disfrutarlo plenamente, puedes acompañarlo con estos complementos ideales:
- Rodajas de naranja espolvoreadas con sal de gusano o sal de ceniza.
- Quesos semimaduros o curados, como el manchego o el oaxaqueño.
- Frutos secos, como nueces o almendras, que equilibran la experiencia.
- Chocolate oscuro artesanal, cuyo amargor resalta las notas dulces y ahumadas del mezcal.
¿Sabías que el tiempo de reposo del mezcal reposado puede variar entre dos meses y un año, y cada destilería utiliza barricas diferentes para darle un sabor distintivo?
¿Con qué se toma el mezcal blanco?
El mezcal blanco es conocido por su pureza y frescura, ya que no pasa por un proceso de reposo en barricas. Su perfil destaca notas herbales, cítricas y ahumadas, con un sabor directo que captura la esencia del agave recién destilado. Esto lo convierte en una excelente opción para quienes buscan una experiencia auténtica y vibrante.
Para disfrutar el mezcal blanco, puedes acompañarlo con:
- Frutas frescas, como piña, mango o incluso rodajas de toronja.
- Jugos naturales, especialmente cítricos como naranja o limón, que resaltan su frescura.
- Sales cítricas o florales, como sal con chile y limón, o sal de jamaica, que intensifican las notas ahumadas y herbales.
- Tostadas ligeras con guacamole o aguachile, que combinan perfectamente con su perfil fresco.
¿Sabías que el mezcal blanco es conocido como “joven” y suele ser la base de mezclas para cócteles, debido a su versatilidad y sabor puro?

¿Con qué se toma el mezcal fandango?
El mezcal fandango es una de las expresiones más auténticas y artesanales de Guardian del Tesoro, elaborado cuidadosamente para resaltar la esencia del agave espadín. Este mezcal se caracteriza por su perfil robusto, con notas ahumadas profundas y un equilibrio perfecto entre dulzura y acidez, ideal para paladares que buscan autenticidad y tradición en cada sorbo.
Para acompañar el mezcal fandango y disfrutarlo al máximo, te recomendamos:
- Rodajas de cítricos, como naranja o toronja, acompañadas de sal de gusano, para intensificar su carácter ahumado.
- Carnes ahumadas o asadas, como cecina o costillas, que complementan sus notas profundas.
- Chocolate artesanal, especialmente con alto porcentaje de cacao, para contrastar con su intensidad.
- Platos tradicionales oaxaqueños, como mole negro o tlayudas, que resaltan su esencia cultural.
¿Sabías que el término “fandango” no solo refiere a una fiesta tradicional, sino que también simboliza la celebración de la vida y la cultura, un concepto que Guardian del Tesoro plasma en cada botella?
¿Con qué fruta se toma el mezcal?
El mezcal, gracias a su versatilidad, puede combinarse con diferentes frutas para realzar sus notas únicas de sabor. Entre las opciones más populares para acompañarlo están:
- Naranja, especialmente acompañada de sal de gusano, ya que equilibra las notas ahumadas y aporta un toque cítrico.
- Guayaba, ideal para contrastar con la intensidad del mezcal, ofreciendo un sabor dulce y tropical.
- Piña, fresca y jugosa, perfecta para destacar las notas herbales y frutales del mezcal.
- Frutos rojos, como fresas o moras, que aportan acidez y un dulzor ligero que complementa perfectamente los mezcales suaves.
¿Sabías que en las culturas tradicionales de Oaxaca se suele acompañar el mezcal con frutas locales de temporada, creando una experiencia única en cada ocasión?

¿Con qué jugo se toma el mezcal?
El mezcal es una bebida versátil que combina perfectamente con una variedad de jugos, realzando su sabor y creando combinaciones refrescantes. Entre los jugos ideales para acompañar el mezcal se encuentran:
- Jugos cítricos, como naranja, toronja o limón, que resaltan las notas ahumadas y aportan frescura.
- Jugo de mango, con su dulzura natural, suaviza la intensidad del mezcal y crea un contraste delicioso.
- Jugo de sandía, ligero y refrescante, que complementa especialmente los mezcales jóvenes y blancos.
Si prefieres experimentar, el mezcal puede ser la base para cocteles ligeros, como un “Mezcal Margarita” con jugo de limón y un toque de sal, o un “Mezcal Tropical” con jugo de mango, limón y una pizca de chile en polvo. Estas opciones permiten disfrutar del mezcal de forma diferente, sin perder su esencia artesanal.
¿Sabías que en Oaxaca es común preparar cocteles con jugos frescos y mezcal para aprovechar las frutas de temporada y mantener la autenticidad de la bebida?
¿Con qué sal se toma el mezcal?
El mezcal no solo es una bebida para degustar, sino también una experiencia sensorial que puede enriquecerse con sales especiales. Entre las más destacadas para acompañar el mezcal se encuentran:
- Sal de gusano, elaborada con gusanos de maguey, chiles secos y sal marina, ideal para realzar las notas ahumadas y terrosas del mezcal.
- Sal de chapulín, que aporta un toque crujiente y sabores intensos, perfecta para mezcales jóvenes con perfiles frescos y herbales.
- Sal ahumada, que potencia el carácter ahumado del mezcal, especialmente en variantes reposadas o añejas.
Elegir la mejor sal depende del tipo de mezcal que quieras disfrutar. Por ejemplo, la sal de gusano complementa muy bien mezcales reposados, mientras que la sal de chapulín armoniza con los sabores frescos y cítricos del mezcal blanco. Lo ideal es espolvorearla sobre rodajas de naranja para un maridaje tradicional y equilibrado.
¿Sabías que la sal de gusano es una tradición oaxaqueña que data de siglos, utilizada originalmente en rituales para honrar al agave?

Cómo disfrutar Guardian del Tesoro, un mezcal 100% agave espadín
Si alguna vez te has preguntado cuál es la mejor forma de tomar mezcal artesanal, la respuesta es sencilla: como más te guste. Pero si quieres aprovechar al máximo su sabor y tradición, aquí te compartimos algunos consejos para disfrutar Guardian del Tesoro, un mezcal joven hecho con agave espadín.
1. Pruébalo solo, sin prisas
La mejor manera de sentir su sabor es tomarlo directo, sin mezclas. Sirve un poco en un vaso pequeño y dale un momento para que libere sus aromas. Cuando lo bebas, hazlo en pequeños sorbos y deja que el sabor se quede en tu boca antes de pasarlo. Así notarás sus notas herbales, un toque ahumado y ese golpe de carácter que lo hace único.
2. Acompáñalo con naranja y sal de gusano
Una de las formas más clásicas de disfrutar el mezcal es con rodajas de naranja y sal de gusano. El dulce de la naranja equilibra la intensidad del mezcal, mientras que la sal realza su sabor. También puedes probar con toronja o lima si buscas un toque más fresco.
3. Combínalo con comida que haga juego con su sabor
El mezcal Guardian del Tesoro es joven y tiene un sabor fresco, por lo que va perfecto con:
- Carnes asadas o ahumadas, como cecina o tasajo.
- Mariscos frescos, como aguachile o ceviche.
- Chocolate amargo, que resalta su lado terroso y ahumado.
- Tlayudas oaxaqueñas, una combinación perfecta para un mezcal tan auténtico.
4. Si lo quieres con algo más, elige lo adecuado
Aunque el mezcal se disfruta mejor solo, puedes probarlo con:
- Agua mineral y un toque de limón para suavizarlo sin perder su esencia.
- Refrescos cítricos como toronja o limón, que combinan muy bien con su sabor.
- Jugo de piña con chile en polvo, si te gusta el contraste dulce-picante.
5. Tómalo con calma y en buena compañía
El mezcal no es para tomarlo de un solo trago, sino para disfrutarlo con calma. Es una bebida para compartir, para acompañar una buena plática y para brindar con amigos o familia.
¿Sabías que…?
El mezcal joven como Guardian del Tesoro es el más cercano a la esencia pura del agave, sin pasar por barricas. Así que cada sorbo te conecta directamente con la tradición y el trabajo artesanal que hay detrás de cada botella.